El ciudadano sayagués Dionisio de Ana Prieto, ha mirado con limpios ojos y ha observado con alma evocadora, perspicacia, sagacidad, equilibrio y amor, los paisajes que en su corazón han tejido sueños vividos y añoranzas de otros tiempos, gentes y costumbres tanto de su tierra natal, Arribes del Duero (Zamora), como de los olores de la mar atlántica de Crunia y las verdes campiñas de su otra tierra gallega y de su sentimiento inquieto y evocador...