En 1963, el Zoológico del Bronx presentó una exhibición titulada << El animal más peligroso del mundo>>. Se trataba de un espejo tras unos barrotes. El espectador se veía a si mismo. Porque el ser humano es el animal más peligroso del mundo.
El arte de matar es la visión de ese animal. La violencia, la crueldad, el cinismo, el desdén por la víctima, la justificación aleatoria del crimen y la banalidad del mal se entrelazan en este relato pasional y escalofriante. La novela entreteje hechos reales con hechos tal vez reales, donde el lector se convierte en testigo ( y presuntamente cómplice) de crimenes perfectos. No habrá catarsis. Viajarás por la mente del protagonista, por sus miedos y sus palabras, en un trayecto delirante por unos asesinatos que, si no sucedieron, podrían perfectamente haberlo hecho.